| La soja lideró la escalada, seguida de cerca por el maíz y levemente por el trigo. A pesar de la incertidumbre generada por los mercados financieros y el ritmo bajista marcado por estos mismo, las cotizaciones lograron desprenderse y marcar ganancias. El principal motor de la suba registrada proviene de la preocupación por el avance de “La Niña” en la región productora de América del Sur, debido a los efectos negativos que la sequía puede generar sobre los rendimientos. Las subas registradas en el nocturno coinciden con dicha preocupación pese a que en Argentina se esperan precipitaciones para mediados de la semana, las condiciones en Brasil no parecen encontrar alivio. Para la jornada del viernes el recupero de fortaleza que presentó el euro frente al dólar ayudó a mejorar la competitividad de los productos norteamericanos. El trigo por su parte recibió el contagio de los demás productos y un impulso extra ante la cobertura vendedora de los inversores. Las ganancias para el cereal se vieron limitadas por las precipitaciones recibidas en la región de las planicies ya que resultaron favorables para el cultivo en su variedad de invierno.
En el mercado local se escucharon algunas mejoras ante la necesidad de mercadería. En línea con el mercado de referencia la oferta por la soja mejoró, por la descarga inmediata de mercadería las fábricas pagaron $1170, oferta que se mejoró para negocios puntuales y de gran volumen hasta los $1210 por tonelada. Por la soja nueva con entrega mayo pagaron U$S270. Pocos cambios en el mercado de trigo pero con un incremento en el nivel de actividad, por el trigo con entrega enero bajo ciertas condiciones pagaron U$S 125, mientras que por la entrega febrero/marzo pagaron U$S 120. Se registraron operaciones por 15.000 tonelada. Por el maíz condición cámara con entrega enero pagaron U$S 135, con mejoras hasta U$S 140 por entrega más diferida en marzo. Se negociaron 8.000 toneladas.
Por ahora esto es todo, buen comienzo de semana.
Saludos, Mariana García.
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