La sequía que afecta los cultivos de cosecha gruesa en la zona núcleo del país y también de Brasil pudo más que la crisis financiera del euro y estableció un freno a la caída que venían registrando las cotizaciones de la soja y el maíz, que comienzan a experimentar una leve recuperación.
Pero, a pesar del alivio en el mercado, la situación de los cultivos en el norte de Buenos Aires y sur de Santa Fe es preocupante, principalmente para el maíz, que está en etapa de floración, momento crucial que define los rendimientos finales. Para la soja, en cambio, todavía queda un margen para esperar lluvias.
A propósito, el climatólogo Eduardo Sierra dijo a La Nacion que hay pronósticos de lluvias para hoy y mañana, y para la semana que viene, que podrían ser "salvadoras".
Para Ricardo Baccarin, vicepresidente de Panagrícola, la sequía comienza a hacerse sentir en el mercado. "Da la sensación desde los últimos días de la semana pasada de que el mercado de granos que venía muy acoplado a la crisis financiera de la eurozona se despegó de esta tendencia porque el clima, tanto en Brasil como en la Argentina, está empezando a hacer un poco de ruido", señaló.
Agregó el analista que en las últimas semanas en el sur de Brasil los requerimientos de agua están en un 40 por ciento de lo que sería normal. "Hay un déficit importante. Y en nuestra zona núcleo también está faltando agua", remarcó.
Se detuvo la caída
Baccarin opinó que esta situación ha generado mejoras en las cotizaciones de los granos que no han sido espectaculares pero sí significativas. "En un escenario en el cual estábamos pensando que iba a seguir bajando el mercado de granos se detuvo la caída y ensayó mejoras", explicó.
Sin embargo, advirtió que la recuperación de los precios es lenta: el contrato soja enero en el Mercado de Chicago (plaza granaria de referencia) llegó a un mínimo de 403 dólares la tonelada y ayer se cotizó en 420,67 (como se informa en la página 7).
"Pero esa posición llegó a pagarse 530 dólares a fines de agosto y principios de septiembre", dijo Baccarin.
En cuanto al maíz, recordó el analista que en esa plaza norteamericana el contrato marzo llegó a alcanzar los 310 dólares por tonelada a principios de septiembre. Días atrás bajó a los 228 dólares, y tras una leve recuperación, finalmente ayer se cotizó en 239,17 dólares.
Pero Javier Buján, presidente de Kimei Cereales, advirtió que no hay que ponerse contentos si esa recuperación se registra porque habrá menos producción.
"Es peferible cosechar 52 o 53 millones de toneladas de soja y después ver cómo manejamos los precios del mercado y no que el mercado esté firme porque hay 45 millones de toneladas", ejemplificó.
Subrayó Buján que la falta de lluvias son más graves para el maíz que para la soja. "La oleaginosa sufre, pero luego recibe lluvias importantes y recupera gran parte, mientras que para el maíz castigado en floración el daño es casi irreversible. Seguiremos atados al mercado climático en América del Sur", sostuvo.
Por su parte, Patricia Bergero, analista de la Bolsa de Comercio de Rosario, dijo que en el caso de la soja es temprano para hablar de daños por sequía porque todavía no empezó la fase de llenado, que es clave.
"Esta situación no es irreversible sobre el rendimiento", señaló. Pero las bajas reservas hídricas en la zona núcleo de maíz hacen que "nos manejemos con cautela", afirmó.
Por su parte, Sierra, profesor de Agroclimatología de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (Fauba) y asesor de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, dijo que se pronostican lluvias para hoy y mañana y también para la semana próxima (28 y 29) y ya está pasando un frente sobre Bahía Blanca. "Totalizarían, entre 50 milímetros de promedio, aunque en algunos casos puntuales se registrarían 100 milímetros", explicó.
También se anuncian lluvias para Brasil, según informó la agencia Reuters haciendo referencia al pronosticador climático Somar.
Por último, Sierra dijo que se puede ver que la mayoría del área agrícola del país está con reservas hídricas escasas, pero que la situación es un poco mejor que el año pasado. "Es usual en los episodios de La Niña (períodos con registros de lluvias inferiores a los normales) que en esta época del año la situación parezca crítica, pero después vienen lluvias que salvan la situación", señaló el climatólogo.. |