Las mismas divisas que ingresan por las ventas del sector agroexportador están permitiendo a los productores agrícolas financiarse con tasas de las más convenientes del mercado.
Los créditos de corto y mediano plazo para agricultores tienen tasas que van entre 3,75% y 5 puntos y están instrumentadas a través de contratos ‘forward’ de granos, mecanismo que implica que el productor puede tomar el préstamo con la presentación del contrato de entrega de los granos. En este sentido, el Banco Provincia bajó lanzó la línea para productores con financiamiento de 3,75% en dólares, a 180 días.
“Este lanzamiento se enmarca en la concepción de un Estado que actúe como aliado estratégico del sector agropecuario”, destacó el gobernador bonaerense Daniel Scioli, durante el evento que se realizó ayer en la sede de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Pero el interés de los bancos por financiar al agro no se inspira sólo en las perspectivas de una buena cosecha si el clima acompaña, sino que les permite colocar el ahorro que tienen en dólares que, según la normativa vigente, sólo pueden prestar a quienes generen ingresos en la misma moneda. Los bancos encuentran al sector agropecuario sentado en primera fila en este segmento de demanda.
Por eso, no son sólo los bancos públicos los que tienen esta oferta. También lo hacen privados como los bancos Galicia, Francés y Santander. Este último, por caso, presta a tasa de 4,25% a pymes agropecuarias.
Con una inflación anual que los privados proyectan en valores que alcanzan el 25%, las actuales tasas de crédito para el sector, tanto en dólares como en pesos, son negativas. Por eso las líneas crediticias, sobre todo las de corto y mediano plazo, crecieron en los bancos dentro del segmento agropecuario.
Y las perspectivas de crecimiento de este segmento son muy buenas a esta altura, cuando se sembró poco más del 35% de las hectáreas sojeras de la campaña.
Con una cosecha proyectada en 52 millones de toneladas para la oleaginosa estrella, valuadas en más de u$s 25.000 millones, los bancos prevén que la reinversión del sector agropecuario, cuando termine la cosecha actual, seguirá haciendo crecer la demanda de crédito del campo.
Aún así, pese a las tasas, muchos productores son reticentes a endeudarse en dólares. Prefieren, como comentó ayer uno productor a El Cronista, tomar tasas al 10% en pesos.
A pesar de que la política oficial es la de mantener el tipo de cambio estable, las alertas de baja de competitividad del sector industrial generan inquietud en algunos que prevén un reacomodamiento en materia cambiaria.
Mientras tanto, desde el Provincia aseguraron ayer que disponen de u$s 300 millones para prestarle al campo.
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