Solo el maíz logró  mantenerse positivo en sus posiciones más cercanas, ante la preocupación por el retrazo en el avance de siembra. De todas formas la liquidación de activos y la caída en el precio del petróleo presionaron sobre el precio del forraje de la nueva campaña. Las bajas más importantes se observaron en el trigo y la soja, la posibilidad de que el área destina a maíz se redirecciones a la oleaginosa ante la imposibilidad de avance presionó a la baja. El trigo culminó la jornada con pérdidas, el tour de Kansas que releva los resultados preliminares de la cosecha no fueron tan pobres como se estimaba, así mismo la liquidación de posiciones adhirió presión a la baja.

El reporte semanal de exportaciones de EEUU resulto bajista para soja y sus subproductos, las ventas del poroto resultaron muy por debajo de lo esperado por los analistas marcando de esta forma el menor valor reportado desde  marzo del 2010. Las ventas de maíz también se vieron reducidas esta semana, el ritmo de ventas comienza a alinearse con las ventas de años anteriores. Solo el trigo supero las estimaciones, resultando en un efecto alcista. El saldo exportable calculado por el USDA para la campaña 2010/11 ya se encuentra cubierto.

En el mercado local la oleaginosa sintió el contagio del mercado de referencia. Con poca actividad en el mercado de trigo, la exportación pagó U$S 200  por el cereal baja proteína. Se escucharon ofertas por el cereal de la nueva campaña, la exportación pagó U$S 180 la entrega diciembre/enero, el volumen negociado alcanzó las 2.000 toneladas. A la espera de nuevas autorizaciones los exportadores se mostraron tranquilos dado que ya cuentan con un volumen de maíz comprado suficiente. El consumo pagó $700 por la descarga inmediata. Hubo correcciones a la baja en la oferta de la soja, las fábricas pagaron  $1260 la descarga inmediata, mientras que la exportación pagó $ 1265. Las operaciones registradas alcanzaron las 5.000 toneladas.

Por ahora esto es todo,

Saludos, Mariana García.