En este sentido, ayer trascendió una carta que la Cooperativa Agropecuaria General San Martín, de Coronel Suárez, le envió al intendente de esa ciudad, Ricardo Moccero, para que interviniera ante el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, y el gobernador bonaerense, Daniel Scioli. "Lo hacemos porque queremos ser escuchados", dijo a La Nacion Oscar Hippener, presidente de esa cooperativa. Esta entidad se encuentra afiliada a la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), una entidad que, a su vez, está en las filas de Coninagro, una de las organizaciones de la Comisión de Enlace.
Pero esta cooperativa de Coronel Suárez no es la única que buscó recurrir al intendente local. Según contó Hippener, en una reunión con otras catorce cooperativas del sudoeste bonaerense, La Pampa y Río Negro, todas afiliadas a ACA, se decidió confeccionar un modelo de carta para que individualmente las distintas entidades se dirijan a sus jefes comunales y pidan por el trigo. Varias de esas cooperativas ya están trabajando en sus presentaciones, según comentó Hippener.
"No estamos en contra de nadie, pero queremos que se aplique el sentido común; estamos necesitando vender", dijo el directivo.
En el Sudoeste bonaerense, una típica región triguera, los productores tienen urgencia por comercializar. Según Esteban Barelli, integrante del área de estudios económicos de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca, en 12 partidos todavía los productores tienen sin vender 1,2 millones de toneladas del cereal por un valor de 300 millones de dólares. Esto sobre una cosecha que en esa región se ubicó en 1,8 millones de toneladas. Es decir, los productores del sudoeste bonaerense sólo lograron vender unas 600.000 toneladas. Peor aún, en Coronel Suárez se estima que no se vendió más de un 15%, contra más de la mitad que se debería haber comercializado "en un año normal", sin intervención en el mercado.
Por ello, en la carta los cooperativistas advierten que esto está generando "una situación de ahogo económico y financiero" en el sector. "Resulta ridículo ser dueños del trigo y no poder venderlo en tiempo y forma, como se vino haciendo libremente hace más de cien años y sin que el mercado interno sufriera faltante alguno, circunstancia que indudablemente, y pese a las favorables condiciones climáticas actuales, limita fuertemente la intención de siembra para el próximo ciclo agrícola 2011
2012, que en los próximos días se debería iniciar", dicen los cooperativistas.
Hippener señaló que "por ahora" los productores están comercializando algo de soja, pero están necesitando hacer lo mismo con el trigo de la última campaña para hacer frente a alquileres, fertilizantes y semillas. Esta no es una zona sojera típica; allí los rindes de soja fluctúan entre 1800 y 2000 kilos por hectárea, contra 4000 kilos que se pueden obtener en el norte bonaerense. El trigo es clave para la economía de estos productores.
"Frente a estos inconvenientes, y en la medida de nuestras acotadas posibilidades, la cooperativa asiste a sus asociados, pero vemos con mucha preocupación la extensión y el agravamiento del problema, por lo que nos obligará a la brevedad a tomar medidas de ajuste para con estos productores, que son un engranaje fundamental en la cadena agrocomercial y con impensadas consecuencias sociales que se trasladarán a los centros urbanos", remarca la carta.
En enero pasado, Coronel Suárez fue uno de los lugares que el ministro Domínguez visitó para prometer soluciones e intentar calmar a los trigueros.
Sin respuesta oficial
"El estuvo acá y nos dijo que estaba trabajando sobre el tema, pero el tiempo pasó y hasta ahora no tuvimos respuestas", indicó el presidente de la cooperativa.
El Gobierno prometió créditos a tasa cero, pero para los productores eso no resuelve el problema, ya que no hay una libre competencia entre molinos y exportadores. Con Domínguez de gira por México con la presidenta Cristina Kirchner, La Nacion intentó conocer la opinión de otros funcionarios de la cartera de Agricultura, sin éxito.
La estrategia de los productores por involucrar a los intendentes y a Scioli se conoció un día después de que en Agricultores Federados Argentinos (AFA), una cooperativa vinculada a productores de Federación Agraria Argentina (FAA), reconocieran que no se cumplió la promesa oficial para que los molinos les compraran 500.000 toneladas. Sólo les compraron 93.000 toneladas.
Para David Hughes, presidente de la Asociación Argentina de Trigo (Argentrigo), "al Gobierno no le interesa la cadena productiva del trigo".
La semana pasada se esperaba un permiso para exportar al menos un millón de toneladas, pero el Gobierno habilitó sólo 200.000 toneladas.
1,2
Millones de toneladas
Es lo que tienen sin vender los productores de trigo del sudoeste bonaerense.
300
Millones de dólares
Es el valor de la mercadería que los productores de esa región aún no pudieron comercializar.