Los cereales lideraron la caída, incluso el maíz alcanzó el límite de baja diario. Las repentinas y abultadas ventas de posiciones por parte de los fondos fueron el principal factor bajista para el forraje. El trigo también sintió la presión bajista de las ventas, así mismo el avance de cosecha del trigo de invierno y las mejoras en las perspectivas del cultivo europeo adhirieron presión a la tendencia. La soja por su parte tocó el mínimo del mes, donde los cambios en la cotización del crudo y el dólar sumaron volatilidad a la jornada. Se presentó el reporte semanal de exportaciones norteamericanas, y las ventas tanto de soja como de maíz fueron inferiores a las esperadas por los especialistas lo que suma presión a la baja sobre los precios de dichos granos. Para la soja la cancelación de 114 mil toneladas de la vieja campaña por parte de China, resultó en un volumen neto de ventas negativo. Aunque los compromisos asumidos respecto a la soja nueva por parte del gigante asiático fueron importantes, dejando una participación neta positiva. Las ventas de maíz se ubican por debajo en 2 millones de toneladas respecto a esta misma altura el año pasado. Las ventas de trigo superaron las estimaciones semanales. El mercado local sintió la presión bajista del mercado de referencia. Por el trigo solo se mostró interés por el cereal baja proteína y la exportación pagó U$S 195 por el cereal con entrega julio. Sin ofertas por el maíz. Ajustes a la baja para la soja, las fábricas pagaron $1250 por la descarga inmediata, por la entrega más diferida en agosto pagaron $1280. Se registraron negocios por 2.000 toneladas. Por la soja de la próxima campaña pagaron U$S 310. Por ahora esto es todo, Saludos, Mariana García. |