El Ministerio de Agricultura de la Nación modificó ayer su anuncio sobre la ampliación del cupo de exportación en 450 mil toneladas. Anteayer, había limitado ese beneficio –que de todos modos es juzgado insuficiente en forma casi unánime por entidades representativas del agro– a productores de tres provincias: Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.

Sin embargo, al trascender ayer esta información a través de este diario, las quejas por lo que se interpretó como algún tipo de discriminación, el ministro del área, Julián Domínguez, modificó su postura.

A través de Radio Mitre, negó que se buscara discriminar a los productores cordobeses. Por la noche, el Ministerio modificó el comunicado que había librado el día anterior –no le cambió la fecha– para incorporar lo que el funcionario había dicho a través de la radio.

Ahora, la información oficial no especifica provincias y, en cambio, incluye una pauta general: “La apertura de este saldo exportable alcanzará a todo el territorio nacional, y en las provincias productoras se agilizará su comercialización”, dice la gacetilla.

De todos modos, el anuncio no remite a ninguna resolución o documento administrativo que recoja la decisión (tampoco lo hacía anteayer).

A Mitre, el ministro le dijo que todo se había debido a un error de comunicación de su cartera. Cabe aclarar que este diario había intentado verificar la información con Agricultura anteayer, sin que se respondiera la consulta.

La discusión por el trigo deriva de que, según los productores, la restricción del Gobierno sobre la exportación del cereal ha derivado en que aún existen cuatro millones de toneladas que no tienen demanda del mercado interno y que tampoco se pueden vender fuera del país. Según el Gobierno, el remanente es menor: 2,6 millones de toneladas.

Tras la derrota en las elecciones santafesinas, con fuerte rechazo en las zonas agrarias hacia el candidato kirchnerista a gobernador, Agustín Rossi, Agricultura y Economía habilitaron la exportación de poco más del 10 por ciento del saldo exportable.

Ayer, el ministro de Agricultura de Córdoba, Carlos Gutiérrez, le envió una carta a Domínguez para expresar su “profunda preocupación”.

“Considerando que la provincia de Córdoba dispone a la fecha de un saldo exportable de aproximadamente 800 mil toneladas, la arbitrariedad de la medida perjudica notoriamente a los productores cordobeses que apostaron en la pasada campaña a este cultivo”, sostuvo.

El anuncio de Domínguez fue criticado por varios sectores del agro.

El presidente de la Sociedad Rural de Río Cuarto repudió “la toma de decisiones en forma demagógica con fines absolutamente políticos”, dijo.

Además, advirtió que las 450 mil toneladas “pueden ser cubiertas fácilmente por exportadores amigos del poder que en todos estos meses formaron stock pagando precios viles a los productores”, aprovechando la débil demanda de trigo derivada de la prohibición de exportación. Santiago Cameron, presidente de la Asociación Argentina de Productores de Trigo (Aaprotrigo), sostuvo que mientras “mientras exista el sistema de Registro de Operaciones de Exportación no habrá precios reales ni mercado posible”