Mientras no pocas proyecciones estiman una siembra que podría convertirse en la más importante de los últimos 40 años, iniciada la campaña de maíz 2011/2012 el Gobierno continúa sin dar señales sobre el cupo que autorizará para la exportación de este cereal. Además, todavía hay cereal "viejo" que se podría aprobar para su venta al exterior.

Alentada por la recuperación del precio (en el mercado local subió de 135 a 177 dólares por tonelada desde igual fecha del año pasado) y nuevas tecnologías que permiten "estirar" el período de siembra del cultivo, para esta campaña se prevé una superficie total superior a los 4,5 millones de hectáreas. Eso incluye tanto el uso del maíz para destino comercial como su empleo para ganadería.

Sin embargo, hay estimaciones aún más optimistas que indican que el área podría tocar hasta los 5 millones de hectáreas. La última vez que el cereal se pudo acercar a esa cifra fue en 1970. Para el actual ciclo, cuya siembra ya empezó en Entre Ríos y en pocos días más arrancará en las mejores tierras del norte bonaerense y el sur de Santa Fe, los semilleros vieron desbordada la demanda por las semillas con mayor tecnología.

Pero estas perspectivas tan positivas pueden quedar empañadas si el Gobierno no da señales sobre la exportación. Sobre todo considerando que la producción abastece largamente las necesidades del consumo interno, que ronda los 7,5 millones de toneladas.

"Con una hipótesis posible de producción de 28 millones de toneladas [la misma presidenta Cristina Kirchner proyectó esa cosecha en la última Fiesta del Maíz en Chacabuco, a principios de mes], si a eso le sumamos los 3,95 de toneladas de carry [del ciclo último] que muestra el Ministerio de Agricultura, vamos a contar con 32 millones de toneladas para la próxima cosecha. La pregunta es ¿por qué no se abre la exportación del año que viene (2011/2012)?", se interrogó Santiago del Solar, presidente de la Asociación Maíz y Sorgo Argentinos (Maizar).

La falta de definiciones comienza a preocupar en el sector. "Escuchamos la intención del ministerio de abrir [las exportaciones] lo que se pueda, pero todavía no hay nada concreto", señaló Martín Fraguío, director ejecutivo de Maizar.

La entidad está aguardando la concreción de un encuentro con las autoridades de la cartera agrícola para abordar este tema.

Respecto de la campaña pasada de maíz, el Gobierno habilitó la exportación de 12 millones de toneladas. Eso equivale a divisas por más de 3600 millones de dólares y una recaudación por retenciones de más de US$ 700 millones.

Preocupaciones

Pero además de no haber registros de operaciones de exportaciones disponibles (ROE) para la próxima cosecha, los productores arrastran otras preocupaciones.

Por un lado, por los cupos y la falta de una competencia permanente entre los compradores del consumo interno y los exportadores hay una brecha de casi 70 dólares por tonelada entre el valor que reciben los productores y el que podrían efectivamente cobrar.

Por otra parte, aún acarrean dificultades para colocar en el mercado el maíz disponible de la última cosecha. Ese cereal podría ser autorizado para exportar si así se decidiera.

"Es difícil conseguir que te compren porque los exportadores no tienen ROE. Está muy difícil vender maíz disponible, especialmente en las zonas alejadas de los consumos [por las firmas que compran para procesar internamente]", expresó Del Solar.

El presidente de Maizar dijo que hoy se da la situación de que el sorgo, que también es un cultivo de primavera/verano, tiene mayor facilidad de venta que el maíz.

"Hoy el sorgo disponible tiene mejor precio y más fácil colocación que el maíz, ya que no tiene las trabas para la exportación", indicó a LA NACION.

Según Del Solar, se puede presentar la paradoja de que mientras los productores siembren maíz continúen con producción almacenada de la última cosecha sin poder comercializar. "El mundo pide a gritos maíz y hoy no se lo puede colocar. Se va a dar la paradoja de que se va a estar sembrando con los silos bolsas de la campaña pasada al lado de las sembradoras", comentó el presidente de la entidad.

En Maizar ponen énfasis en que, además de haber una gran oferta de maíz, también va a registrarse una importante disponibilidad de otros granos que también pueden tener un destino como sustituto forrajero en algunos casos, como sorgo, cebada y trigo, y que por su calidad no se pueden vender.

En voz alta

"La pregunta es por qué no se abre la exportación del año que viene. El mundo pide a gritos maíz"

Santiago del Solar
PRESIDENTE DE MAIZAR

"Escuchamos la intención del ministerio de abrir lo que se pueda, pero no hay nada concreto"

Martín Fraguío
DIRECTOR EJECUTIVO DE MAIZAR