En los últimos días el nuevo esquema de comercialización de granos diseñado por autoridades de Agricultores Federados Argentinos (AFA) fue objetado por sectores de la exportación nucleados en Ciara-CEC y de la Industria Molinera (FAIM), según pudo saber Infocampo.com.ar.
Por tal motivo hoy viernes los máximos directivos de AFA se reunieron en la sede que la entidad tiene en Rosario para analizar las objeciones al proyecto y evaluar la implementación de modificaciones al mismo (el miércoles que viene realizarán una presentación oficial de la iniciativa).
"Este proyecto es una muy buena salida para lograr cambiar de manera definitiva el actual sistema de comercialización que ha demostrado tener muchas falencias", comentó una fuente de AFA que pidió no revelar su identidad.
"Sabemos y estamos analizando los pedidos de cambios por parte de la exportación y de los molinos que no quieren perder los beneficios con los que cuentan", indicó la fuente, para luego mencionar que "creemos que la iniciativa va a ser muy bien recibida por el gobierno nacional".
Además de las cuestiones referidas al mercado forward, los aspectos más resistidos por la exportación y la molinería son aquellos vinculados a la obligación de contar con “certificados de libre disponibilidad” (obtenidos por el productor al declarar sus existencias y la superficie sembrada) para poder concretar ventas externas de cereales y harinas.
Es decir: cuando un exportador solicite el permiso de embarque (ROE) de maíz, trigo o algún producto derivado de ambos cereales, deberá acreditar que dispone de los certificados correspondientes por un volumen equivalente al solicitado (se prevé la posibilidad de que los certificados sean transferidos desde los corredores o los acopios a los exportadores).
En el esquema actual los exportadores, para poder obtener ROEs, deben acreditar compras en el disponible o en el mercado futuro (a través de forwards o compras en los mercados institucionales del Matba o del Rofex).
El esquema pretende cambiar las relaciones de fuerza entre grandes grupos exportadores de granos y entidades cooperativas y acopios.
La propuesta de AFA también contempla un aspecto muy difícil de instrumentar en la práctica para la mercadería destinada al mercado interno. En este caso se prevé la creación de un “fideicomiso” que compre a los productores y venda a los consumos internos.
El administrador del fideicomiso –según propone AFA– serían las Bolsas de Cereales de las diferentes regiones productivas y el mismo se conformaría con recursos aportados por el Estado nacional.