Tras la serie de acuerdos logrados entre Argentina y China para elevar las exportaciones argentinas de cebada cervecera, disponer la reapertura del mercado de carne del país asiático e intercambiar productos lácteos como modo de incrementar el comercio y atraer inversiones, ahora nuestro país busca colocar ventas de maíz en el gigante asiático.
Domínguez habló durante una visita de su par chino, Han Changfu a Argentina, luego de la decisión de Pekín de reanudar las importaciones de aceite de soja del país sudamericano, que habían estado prácticamente paralizadas por unos seis meses.
La principal traba para vender maíz a la nación asiática la ejerce la política de importación de ese país que excluye hasta el momento a las variedades genéticamente modificadas. Luego de una reunión entre funcionarios de ambos países, el ministro de Agricultura afirmó que "se está negociando el protocolo sanitario para el acceso al mercado chino de nuestro país". Se espera entonces, que las compras que actualmente mantiene vedadas al país sudamericano, se aceleren en el 2011.
Se alimentaron rumores de que en mayo de este año hubo China había comprado maíz de Argentina, aunque ningún embarque fue finalmente confirmado.
Argentina es el segundo proveedor internacional de maíz y viene trabajando en las negociaciones con China desde el 2004, cuando los presidentes Néstor Kirchner y Hu Jintao realizaron visitas mutuas y establecieron la Asociación Estratégica entre ambos países.
De acuerdo con el comunicado emitido desde el Ministerio de Agricultura, China podría importar 5 millones de toneladas de maíz en el 2011, un crecimiento interanual del 150%, lo que le daría un saldo exportable de 18,5 millones de toneladas del cereal en la campaña 2010/11, cuya siembra está avanzando con la perspectiva de lograr un récord de 26 millones de toneladas, según datos la cartera agropecuaria argentina.