La cumbre europea del domingo en Bruselas permitió precisar las grandes líneas del plan de recuperación de la zona euro: los acreedores de Grecia deberán pagar más de lo previsto hasta ahora; los bancos europeos serán recapitalizados y el fondo de rescate europeo (FEEF) será reforzado, aunque las modalidades aún no fueron definidas.
La nueva cumbre, para cerrar los acuerdos, se realizará el miércoles en Bruselas. "Hemos hecho avances y en tres días concluiremos", aseguró ayer el presidente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy.
La Bolsa de Atenas registra una caída en torno al 5% arrastrada por el derrumbe de las acciones bancarias debido a que el acuerdo europeo contempla una fuerte quita de la deuda de Grecia.
Los bancos, que tienen más de 44.000 millones de euros en títulos soberanos griegos, podrían sufrir un golpe importante después de una eventual quita de la deuda griega, y si recurren al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) se llevará a cabo una nacionalización, señalaron distintos medios periodísticos helenos.
"Yo estaría pensando aprovechar esta subida para vender, en vez de creer que esta vez es diferente, porque no lo es", expresó un analista europeo. "¿Cuánto van a tardar en darse cuenta que no hay solución a esta crisis en la zona euro o por lo menos no habrá una que no requiera una gran cantidad de dinero?", agregó.
El optimismo fue mucho mayor en los mercados asiáticos, alentados tanto por los avances de las discusiones para resolver la crisis de la Eurozona como por datos de repunte de la producción industrial china.
Antes, la plaza de Tokio avanzó 1,9%, Hong Kong subió 4,4%, Sídney 2,7%, Seúl 3,3% y Shanghái 2,3%. |
